Foto: Juan Carlos Ramos y Roberto García (derecha), en el Parque Científico y Tecnológico de Cantabria (Pctcan). / DANIEL PEDRIZA

 

El clúster cántabro del sector TIC reivindica la puesta en marcha de una  Agenda Digital, así como un centro de ciberseguridad regional.

La Asociación de Tecnologías de la Información y la Comunicación de Cantabria, conocida como clúster TERA, reclama «sensibilidad» al Gobierno autonómico y resto de Administraciones públicas de la Comunidad hacia las empresas locales en los procesos de licitación que se impulsen desde la región. El colectivo, que aglutina a 32 empresas y entidades, nació en 2020 y pese a la coyuntura convulsa en la que ha dado sus primeros pasos, busca seguir creciendo para ser una voz que escuchen atentamente el resto de agentes, en especial respecto a sus análisis y recomendaciones sobre la transformación digital de la economía y el territorio, empezando por las propias competencias digitales de ciudadanos y trabajadores.

Según recuerda el gerente del clúster tecnológico, Juan Carlos Ramos, TERA surge «en febrero de 2020, un mes antes de la pandemia, aunque avanzó de forma incipiente el año anterior. Inicialmente estuvo impulsado por cuatro o cinco empresas del sector que buscaban integrar a todos los agentes que operan en el ámbito de las tecnologías de la información y comunicación de Cantabria», arranca.

 

¿Qué busca el proyecto? «Estrategias conjuntas para el incremento de la competitividad, así como oportunidades de negocio conjuntas», sostiene.

Según Ramos, el punto de partida del trabajo se sustentaba en torno a un análisis DAFO (fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades). El portavoz apunta que en Cantabria existen unas 230 empresas tecnológicas, que representan el 0,35% del sector TIC nacional, por debajo del clásico peso del 1% regional sobre el conjunto del país.

Como área clara de mejora, «tenemos un predominio de microempresas, esto es, un problema de tamaño. Tampoco había demasiada inversión empresarial, así como poca visibilidad.

Igualmente, falta de capital riesgo…». detalla, para agregar que la cifra de negocio global es de 500 millones de euros.

 

TERA nació en 2020 con la idea de favorecer estrategias conjuntas para elevar la competitividad entidades tiene en la actualidad la Asociación, tanto privadas como público-privadas

El clúster propone mirar a lo que están haciendo comunidades vecinas como modelo a seguir del sector TIC nacional representan las compañías cántabras del ramo

 

Sentada esta premisa, el gerente entra en materia. «Los principales beneficiarios de la contratación pública en Cantabria son las grandes multinacionales. Ferrovial, Telefónica, ATOS…», afirma.

¿Qué diferencia a TERA de Ascentic? «Ascentic es la patronal cántabra del sector tecnológico. Promueve iniciativas para el fomento TIC en todos los ámbitos y representa a las compañías. TERA busca negocio conjunto entre las organizaciones del sector. Favorece la creación de UTE tanto desde dentro como hacia afuera. Fomentamos cooperación entre socios para solventar problemas de escala. Además, garantiza la mano de obra tecnológica y apostamos por una apertura exterior hacia otras autonomías. Creemos que ambas entidades son compatibles», manifiesta.

Demandas y fondos europeos

Entre los retos del clúster emerge de manera irrenunciable posicionarse como «interlocutor institucional en la región». A partir de ahí, una demanda: «La creación de una Agenda Digital en Cantabria.

Somos la única comunidad sin una agenda que ordene las ideas y proyectos del Ejecutivo en materia de digitalización», sostiene, para ‘salvar’ de esta situación a la Consejería de Sanidad.

Las reivindicaciones no acaban ahí. «Pedimos la existencia de un centro de ciberseguridad para Cantabria, que no existe y casi todas las regiones están trabajando en ello», agrega. «Depende del enfoque que

quieras dar al centro tiene que impulsarlo el sector privado u otro», completa el vicepresidente, Roberto García.

«La suma de todas las competencias de TERA son capaces de atender cualquier necesidad tecnológica. Queremos que el Gobierno regional tenga sensibilidad en los pliegos. Deben desglosarse más para especializar más las oportunidades», dice Ramos.

¿Y la gestión de Cantabria para proponer proyectos susceptibles de atraer fondos europeos? «Con mirarnos al espejo de las comunidades cercanas, nos conformamos», admiten.

 

JESÚS LASTRA

Santander Martes, 22 marzo 2022

El Diario Montañés